Míticos samuráis, temibles ninjas, sushi, tecnología de punta, anime, templos asombrosos,  asientos de excusado con más botones que una cabina de avión, taxis impecables y con puertas que se abren solas, silencio absoluto en el tren o metro por respeto, Ryokanes y Godzilla.

Japón es ese lugar justamente donde una cultura milenaria, cuyas tradiciones perduran hasta el día de hoy, se mezcla con una modernidad tan insólita que en ocasiones podrías pensar que estás en una película de ciencia ficción.

Desconozco si este mismo sentimiento de asombro le sucede a personas de otros países o regiones, pero como mexicano desde el momento en el que pones un pie en Japón notas que hay algo diferente, muy diferente.

He tenido la fortuna de poder viajar y he estado en muchas ciudades, aeropuertos, estaciones de trenes,  metro y autobuses, hoteles, restaurantes, etc., pero cada uno de estos lugares en Japón son adictivamente contrastantes. Digo adictivo por que son los pequeños detalles que notas en la cultura, la gente, los paisajes, los lugares que te cautivan de tal manera que quieres conocer más y más.

Aquí te enlisto algunos:

  1. Reverencias. Cada vez que veía a platicar personas en la calle justo al despedirse se hacían reverencias, y no sólo una, en promedio hacen unas 3 o 4 cada vez que se van alejando poco a poco hasta que están a unos dos pasos de distancia. En diversas ocasiones hice gestos de caballerosidad con extraños, por ejemplo le ayude a una mujer a bajar una maleta enorme de unas escaleras y le cedí mi asiento a una señora, ambas me hicieron tantas reverencias de agradecimiento que me sentía extraño, con un “arigatou” hubiera sido suficiente.
  1. Bienvenidas a los locales y restaurantes. La primera vez que entré en una tienda en Japón me asusté y me quedé con cara de “¿y ahora que hice?”, en cuanto puse un pie dentro del establecimiento escuché una voz que me daba la bienvenida gritando algo (desconozco que decía), después como si fuera un eco escuché otra voz, luego otra y al final otra. Todos los empleados de la tienda me daban la bienvenida gritando. Como no sabía que decían al principio sentí como si ellos mismos se estuvieran alertando del peligro próximo.  (Lo mismo sucede cuando te vas del lugar.) Después de un día o dos me acostumbré y hasta me sentía mal por ellos, me gritaban tan efusiva y amablemente como si esperaban una respuesta de mi parte, en momentos quería gritarles en español “GRACIAS POR RECIBIRME, YO TAMBIÉN LOS QUIERO” aunque no me entendieran.
  1. Timidez extrema. Ningún japonés se te quedará viendo, y si por casualidad cruzan miradas él será el primero en apartarla inmediatamente. Es impresionante observar el contraste entre sus personalidades con su arte y entretenimiento. En la realidad parece como si cada uno de ellos viviera en una pequeña burbuja alejado de todos los demás, en la calle o en el metro los verás con la vista fija a su celular (aquí sucede en mayor medida que en cualquier otro lugar que haya visto antes, tanto en jóvenes y adultos), sin hacer gesto alguno, ninguno de ellos estará hablando, únicamente se mensajean, no hacen contacto visual y cuidan su espacio personal. Todos están muy ocupados en sus asuntos, pero basta con observar sus expresiones artísticas y de entretenimiento para notar el gran contraste de personalidades. Por ejemplo, el anime japonés, el cual es popular entre toda la población y edades, tiene unas historias tan profundas y bizarras que te cautivan, si  jamás has visto anime y crees que es tan sólo se trata de Dragon Ball o Pokemon, te sugiero que empieces viendo películas como El cementerio de las luciérnagas, El Viaje de Chihiro, Mi vecino Totoro o algo de Hayao Miyazaki para que conozcas lo interesante y  la profundidad de las historias que se encuentran detrás del anime. Y si crees que el anime es extraño e interesante, entonces el ver un programa de televisión japonesa, aunque no hables japonés y no tenga subtítulos, es extremadamente divertido. La forma en que desarrollan las entrevistas, dan las noticias, presentan a las personas e inclusive sus telenovelas están llenas de historias y personalidades que en la vida real ocultan, es como si se tratará de dos sociedades diferentes, la que vez en la pantalla y la de la realidad.IMG_2159_Fotor
  1. Kimonos vs Otakus. Si caminas por las calles de Japón no te será extraño ver a una señora vistiendo un tradicional Kimono y unos dos pasos más adelante verás un grupo de Otakus (Subcultura para definir a un grupo de personas con obsesiones con algún tipo de anime, videojuego u otra cosa, al punto que se visten de tal, en términos coloquiales: nerds o geeks al extremo) este contraste de la tradición versus la modernidad hace de las calles de Japón un lugar muy entretenido para tan sólo sentarte y ver durante horas a las personas pasar .IMG_2921_Fotor
  1. Templos y Pachinko. En muchas ciudades de Japón encontrarás una de dos cosas en cada esquina: un templo o un establecimiento de Pachinko. El pachinko es una especie de pinball / maquinitas. Aún desconozco bien como se juega pero al parecer es sumamente popular por que el país está lleno de esto. La atmósfera que encontrarás en los templos hará que te transportes cientos de años al pasado, sobre todo en los cuales te tienes que quitar los zapatos para entrar y poder apreciar el interior. Muchos templos han sido reconstruidos a través de los años debido a que se han incendiado pues su construcción es enteramente de madera, que por cierto el detalle del trabajo en la madera es asombroso. Vale la pena visitar un templo como el de Nara, el cual alberga a la estatua de Buda más grande de Japón y está construido enteramente en madera.IMG_2394_Fotor
  1. Paisajes de cuentos de hadas. Si viajas por Japón te darás cuenta que el país cuenta con unos paisajes hermosos, desde la montaña hasta el mar, encontrarás una razón por la cual no querer despegarte de la ventana del tren mientras viajas. Y por si fuera poco, la mayoría de los templos cuentan con jardines que emanan una tranquilidad absoluta, estoy seguro que si meditas en alguno de estos jardines inmediatamente encontrarás la paz interior.IMG_3296
  1. Ceremonias del té, ninjas que sirven la comida y tomar un café con búhos. El comer en Japón no sólo es la experiencia de probar autentico sushi, el cual es delicioso, si no también de vivir esas experiencias únicas que sólo los japoneses saben como ofrecer. La mayoría de las personas que viajan a Japón quieren vivir la experiencia de estar en una ceremonia del té, lo hice y es bastante interesante, pero entrar a un restaurante con temática de ninja hace que el termino “salir a cenar” cobre un nuevo significado, sobretodo si tu mesero está vestido de ninja y el restaurante cuenta con pasadizos secretos. Pero si los ninjas no te parecen tan atractivos y eres amante de los animales, entonces te sugiero que vayas a tomar un café con búhos o gatos, son pequeños establecimientos en donde además de tomar un café podrás convivir con estos pequeños animalitos.

En fin, es difícil describir todos los detalles que me cautivaron de este país pero sin duda alguna es un lugar que debería encabezar la lista de “Lugares que ver antes de morir” de cualquier persona. Y si crees que es caro, lee mi artículo de cómo y cuanto cuesta viajar a Japón, quizás te sorprenda que es más posible hacerlo de lo que tu crees. En definitiva un lugar en donde la tradición y la modernidad convergen de tal forma que te cautiva y no te quieres ir.